Hoy en día, en cualquier lugar aparecen escaparates saturados para que todo el producto quepa sin orden, sin coherencia, sin estética y mal iluminados, o sin iluminación. Puede existir la falsa creencia de que un escaparate de diseño tiene un coste inasumible incluso de que no se necesita este componente diferenciador. El escaparate tiene que ser limpio, estético e iluminado. Se pueden encontrar muchos ejemplos de escaparates realizados con pocos recursos.Por el contrario, un escaparate con poco producto, presentado correctamente y bien iluminado refuerza la imagen del establecimiento siendo garantía de calidad y éxito comercial..